El jefe de Veronika la pilló fumando y le ofreció un rapidito para mantenerlo duro. Después de una sesión de coche caliente, la llevó a casa para más intensa acción por detrás, cabalgando y satisfaciendo sus deseos cremosos.
Encontré a mi prima fumando y decidí silenciarla con un rapidito.Veronika, mi jefa, fue la que me pilló en el acto.Tuve que actuar rápido para encubrir lo que acababa de suceder.Sabía que si mi jef se enteraba, sería el final de mi trabajo.Rápidamente envolví mis brazos alrededor de ella y le dije al oído, "Por favor, no digas nada".Ella me miró con una mezcla de sorpresa y confusión.Podía ver el deseo en sus ojos, y sabía que tenía que aprovecharlo.La levanté y la llevé al sofá, donde comencé a desnudarla lentamente.Su cuerpo temblaba de anticipación mientras revelaba sus tetas perfectamente formadas y su coño cremoso.No perdí tiempo en darle lo que quería, y pronto nos involucramos en un revolcón salvaje y apasionado.