Después de una discusión acalorada con mi madrastra, me di vuelta a su mejor amiga para la comodidad. La atractiva morena estaba más que dispuesta a disfrutar de un poco de placer oral, lo que llevó a un encuentro intenso y satisfactorio.
Después de un caliente encuentro con mi madrastra, me vi con más ansias.Como amiga de la familia, decidí darme placer con su mejor amiga, una bomba de ébano tentadora.Me atrajeron a sus labios deliciosos, anhelando el sabor de su dulce néctar.Mientras nos retiramos a los acogedores confines de su morada, el calor entre nosotros se intensificó.Separé ansiosamente sus piernas, buceando en sus profundidades con una pasión desenfrenada.El área íntima de su madre era un festín para mis sentidos, y saboreé cada momento.El sabor de ella era embriagante, me volvía loco de deseo.Me recreé en la experiencia, disfrutando de cada lamida y chupada.Sus gemidos resonaban en la habitación, avivando mi deseo.La vista de sus crujidos brillantes, resbaladiza por mi atención, era hipnotizante.Estaba perdida en los agones del placer, mi mente consumida por el sabor de ella.Lo único que me traía de vuelta era la vista de su clímax, un testimonio de mi destreza oral.
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